27 de septiembre de 2019

Nuestra Señora de los Siete Dolores (Eslovaquia)

Del sitio Aleteia:

Eslovaquia, en Centroeuropa, es uno de los territorios que evangelizaron san Cirilo y san Metodio, hoy copatronos de Europa, en el siglo IX d.C. 

Por aquel entonces, el enclave denominado Sastín era un castillo, una fortificación que protegía el trazado de comunicaciones por el Danubio y el área de la Gran Moravia que hoy corresponde a la República Checa. En el reparto de territorios actual, sin embargo, la población de Šaštín se encuentra en Eslovaquia.

El primer texto escrito que hace referencia al castillo es de 1204 en el que Imrich II hace donación de la propiedad. Allí residía el señor del condado y además tenía su sede el arzobispo. En la fortaleza existía una capilla. 

El lugar que hoy encuentra el visitante es una basílica rodeada de jardín y bosque, en un enclave precioso. Ya la palabra de Šaštín lo recoge, porque en su origen se formó a partir de las palabras “Shaas” y “Tín”. Así, sería un castillo de árboles apretados.

Desde aquella época medieval, se sabe que cerca de Šaštín había un árbol del que los ya cristianos colgaron una pintura de los Siete Dolores de la Virgen. Aquella imagen concentró la mirada de los fieles durante siglos y fue el germen de una devoción que ha alcanzado nuestros días. 

En el año 1564, Angelika Bakičová, la esposa del conde Imrich Czobor, que era el dueño de Šaštin, tenía un problema familiar y prometió a Dios que si se solucionaba haría esculpir una estatua de los Siete Dolores de Nuestra Señora. 

Así fue, el problema se solventó y la señora del castillo encargó la estatua, que fue colocada en una capilla triangular que puede visitarse en la actualidad.

En la segunda mitad del siglo XVI, debido a los constantes ataques de los turcos, la imagen peligraba y se decidió su traslado provisional a un castillo cercano para que quedara más protegida. Quedó en la capilla de san Imrich. 

En 1710 de nuevo regresó a Šaštín y la fama milagrosa de los Siete Dolores de la Virgen no paró de aumentar.

En 1732, en vista de la fama que rodeaba a la imagen, el obispo de Esterházy creó una Comisión que estudiaría los 726 casos que hasta el momento se documentaban acerca de posibles curaciones milagrosas. El resultado fue que la imagen fue declarada milagrosa y el 10 de noviembre de aquel año, en medio de una fiesta que convocó a gentes de todo el país, se refrendó su valor milagroso. 

En 1733, la Orden Paulina se hace cargo de los Siete Dolores de la Virgen y construyen una iglesia y un monasterio. Sin interrupción es centro de peregrinación de los fieles que acuden a Nuestra Señora. 

En 1760 ya se había cubierto aguas y el constructor imperial, Hildebrandt, se encarga de la decoración interior del templo, del altar de mármol rojo y de la fachada. Los gastos corren a cargo de las gentes de la zona, que contribuyen generosamente con donativos y a ellos se suma una aportación de la emperatriz María Teresa.
En 1762 se consagra el templo. 

El 8 de septiembre de 1864, la estatua fue enriquecida con dos coronas de oro bendecidas por el Papa Pío IX. Por los textos históricos sabemos que asistieron a la ceremonia unos 300 clérigos y 120.000 laicos. 

En 1914, a causa de la Primera Guerra Mundial, se retiraron las campanas para fundirlas y emplearlas como material bélico. Estas no serían sustituidas hasta 1928, en que llegaría una campaaa de más de 4 toneladas. 

El 22 de abril de 1927, el papa Pio XI, con el decreto Celebre apud Slovaccham gentem, declara a la Virgen María de los Siete Dolores la santa patrona de Eslovaquia. Un mes después, el 22 de mayo, fue proclamada solemnemente por tres obispos y 40,000 peregrinos. 

Šaštín ha sido testimonio de la persecución religiosa, primero con la disolución de la Orden Paulina y más tarde, en 1950, con la represión comunista que expulsó a los salesianos. El sacerdote diocesano era quien se hizo cargo entonces y, contra todo pronóstico, las peregrinaciones no pararon. 

En 1964, pasa a ser basílica menor por nombramiento papal. 

En 1990, con la caída del Muro de Berlín y el declive del comunismo, el santuario vuelve al cuidado de los salesianos.

Ese mismo año, el Papa San Juan Pablo II sobrevuela la basílica en helicóptero y afirma que tiene el deseo de acudir a los Siete Dolores en peregrinación. Así es, en julio de 1995, en su visita a la que entonces era Checoslovaquia, el Papa visita a la Virgen. 

Otra santa, la Madre Teresa de Calcuta, también peregrinó al santuario. Fue el 6 de junio de 1987 y de aquella visita se conservan unas pocas imágenes fotográficas.

La basílica ha establecido varias peregrinaciones anuales que tienen una afluencia numerosísima de personas: por San Valentín (14 de febrero), la peregrinación de hombres (día después del Domingo de Resurrección), de maestros (el 6 de mayo por Santo Domingo Savio), de embarazadas (para el Día de la Madre, el 2 de mayo), de los católicos griegos de la eparquía de Bratislava (sábado después de la Fiesta del Sagrado Corazón de Jesús), del último sábado de junio, de la Hermandad del Rosario (7 de octubre) y de corazones rotos (divorcios, matrimonios y familias en crisis), en octubre. 

La gran fiesta de peregrinación nacional se celebra cada 15 de septiembre, festividad de Nuestra Señora de los Dolores en toda la Iglesia universal.

26 de septiembre de 2019

Nuestra Señora de la Caravina

Del sitio Santuari Mariani:

El 11 de mayo de 1562, según la tradición popular, cuando terminó una procesión en la cercana aldea de Cima, los fieles regresaron a sus casas.

Dos mujeres, Pedrina di Cortivo y Beltramina Mazzucchi, llegaron a la capilla de Caravina, que había pintado en el fondo la Madonna Addolorata con Jesús muerto de rodillas, y entraron a rezar a la Virgen.

Para su asombro la vieron llorar de ambos ojos. La noticia se extendió por todo el territorio y también en la cercana Suiza y numerosos milagros confirmaron el llanto milagroso de la Virgen. El Arzobispo de Milán, que entonces era San Carlos Borromeo, fue informado de estos milagros y ordenó las pruebas canónicas. Más tarde, la autoridad eclesiástica declaró milagrosa la pintura de Nuestra Señora de Caravina y ordenó la erección del Santuario.

En la sacristía se expone la estola que el Arzobispo de Milán, el Cardenal Carlo Andrea Ferrari, llevó en el acto de recibir la unción extrema (8 de diciembre de 1920) y por su voluntad donada al Santuario de Caravina.
En el interior de la iglesia, a la derecha de la puerta principal, una inscripción latina recuerda al escultor Gian Antonio Paracca di Cressogno, conocido como el Valsoldo, que trabajaba en Roma en la época del Papa Gregorio XII.

El escritor Antonio Fogazzaro en el "Pequeño Mundo Antiguo" ha cantado románticamente el paisaje y la belleza natural del lugar donde se encuentra el Santuario, a las afueras de Valsolda.

25 de septiembre de 2019

Nuestra Señora de Debska

Del sitio Gaudium Press:
La ciudad de Kalisz, considerada la más antigua de Polonia por haber sido el lugar de un asentamiento romano en el siglo II, tiene ahora un nuevo Santuario mariano. El templo, dedicado a Nuestra Señora de Debska, Maestra y Guardiana, conserva una venerada imagen de la Santísima Virgen pintada cerca del año 1450 que adquirió fama de milagros en 1601.
El templo fue objeto de una notable restauración, y el Obispo de Kalisz lo dedicó nuevamente y celebró el Sacramento de la Confirmación en una solemne ceremonia. En su predicación, destacó el compromiso de los feligreses y sus aportes, que comparó al óbolo de la viuda en el Evangelio. "Gracias a todos los que apoyan la parroquia con su oración, su sacrificio y su bondad", indicó el prelado.
A los confirmandos, Mons. Janiak invitó a dar un testimonio palpable de la fe en su relación con las demás personas. "Nosotros de otra manera no podemos demostrar el amor a Dios", expuso el prelado. "Observen si por accidente alguien está llorando por su causa, si ustedes no están molestando a alguien o si no necesitan pedir perdón a alguien. Los Santos muestran dos señales de la santidad: el amor por la Eucaristía y el amor por los demás".
El hasta hora templo parroquial se destacó por ser un lugar de profunda devoción mariana, especialmente desde 1607. En ese año, la imagen que había estado en una capilla desde el siglo XVI fue entronizada y la fe de los devotos fue respondida con numerosos reportes de milagros y favores. El entonces Arzobispo de Gniezno y Primado de Polonia, Mons. Stanislaw Karnkowski, declaró su admiración por esta manifestación de la intercesión de la Madre de Dios y el lugar sagrado se convirtió en destino de peregrinaciones y ofrendas votivas.

24 de septiembre de 2019

Nuestra Señora de la Vega del Haro

Del sitio de la Cofradía de la Virgen de la Vega:

Muy escasas son las noticias que de la milagrosa imagen de la virgen de la Vega tenemos hasta el siglo XVII y XVIII, en que las diferentes fases de la construcción de la actual basílica deja abundantes detalles a través de los libros de fábrica y las cuentas que rinde la Cofradía y los encargados de financiar su construcción. 

Hasta ese momento la escasez de datos históricos contrastados, bien por falta de una investigación seria y profunda o bien por su inexistencia real, han hecho florecer algunas leyendas y tradiciones sin ninguna base rigurosa, que no obstante, se han ido distribuyendo entre las gentes y los panfletos informativos como hechos reales, toda vez que los mismos historiadores recogen estas tradiciones ante la necesidad de dar un porqué y un como a la contrastada devoción que desde el siglo XVII se profesa en la ciudad de Haro y su comarca, a la imagen de Ntra. Sra. la Virgen e la Vega.

Pero sin duda la tradición más conocida y divulgada de la imagen de Ntra. Sra. de la Vega es la leyenda Granadina. Esta, tal como la tradición la ha ido trasmitiendo, vendría a ser la siguiente: Tras la invasión de la península ibérica por los musulmanes, a raíz de la derrota del rey Don Rodrigo en la tristemente famosa batalla de Guadalete, el año 711; un grupo de cristianos que vivían en las fértiles vegas de Granada, se vieron obligados a huir dejando abandonadas sus tierras. En su huida llevaron consigo su más importante tesoro, una milagrosa imagen de la virgen que veneraban desde hacia tiempo y que no podían permitir que cayera en manos de los infieles invasores. Transportaron su imagen hacia el norte hasta llegar a las orillas del río Ebro en su confluencia con el cauce del Ojatirón, muy cerca del emplazamiento de la actual ciudad del Haro, que aun no existía como tal. 

Allí escondieron su imagen, en las tierras de aquella rica vega que tanto les recordaba al lugar de donde procedían. Muchos años después, tras la reconquista de las tierras riojanas y el asentamiento de poblaciones cristianas en sus tierras, unos hortelanos que habían plantado su huerta en aquél lugar descubrieron la imagen, que se les apareció en un cebollar de su propiedad. Esta aparición supuso un acontecimiento para los habitantes de aquellas tierras que se aprestaron a construir una modesta ermita donde venerar aquella imagen tan milagrosamente aparecida.

Pasó el tiempo y arraigó la devoción de los lugareños por aquella imagen, pero los granadinos, enterados del hallazgo regresaron para recuperar a su virgen, aduciendo sus legítimos derechos sobre ella. Los riojanos, ante las evidencias aportadas, con gran tristeza en su corazón, tuvieron que entregar aquella imagen a la que tanto querían y que tanto bien les había reportado. 

Usaron los de Granada unos bueyes para su transporte resultando que al llegar a las lindes de aquellas tierras los anímales paraban y no había forma de hacerlos continuar, intentaron a la desesperada aquellos hombres dar vuelta a los bueyes para regresar a la ermita que habían dejado atrás y comprobaron con asombro que los animales tomaban mansamente y con decisión la vía de regreso. Intentaron de nuevo llevarse a la virgen por el mismo método he hicieron, esta vez, un largo camino, hasta llegar a una posada donde se quedaron a pasar la noche. Al amanecer, comprobaron con asombro que los bueyes junto con su preciosa carga habían desaparecido. No fue tanta su sorpresa al comprobar que los bueyes habían regresado, sin que nadie les condujera, a la modesta ermita de la Vega. Por fin comprendieron que era la mismísima Madre de Dios la que por este prodigio les estaba indicando que quería que aquella imagen se quedara esa ermita, para su veneración por los lugareños y sus futuras generaciones, y así lo hicieron, con mucho dolor de su corazón abandonaron su pretensiones y dejaron en la vega de Haro su venerada imagen.

Hasta aquí la leyenda-tradición conservada en el tiempo y que como otras muchas de vírgenes aparecidas de aquella época recoge conocidos lugares comunes conducentes a expresar la milagrosa unión de una imagen y su pueblo. Esta bonita historia recogida incluso por los historiadores más reputados de la región, como D. Domingo Hergueta, ha pasado de boca en boca convirtiéndose en un hecho aceptado por el pueblo jarrero, que con esta copla, convertida en conocida jotilla, que todo riojalteño conoce y canta, ha propagado en el tiempo el sentir de las gentes hacia la Virgen de la Vega de Haro. 

Una primera leyenda, claramente errónea, citada por el padre F. Anguiano, sitúa a la imagen de la Virgen de la Vega entre las más antiguas de España, especulando que fue repartida con otras, por los apóstoles Santiago y San Pablo, en sus respectivas visitas a la península ibérica, a principios del cristianismo. Entendemos que al referirse a esta imagen se referiría el padre Anguiano a la primitiva imagen de la tradición granadina, pues la actual es claramente una imagen gótica del siglo XIV. En cualquier caso es imposible que los Santos Apóstoles referidos, pudieran haber traído imágenes de Ntra. Sra. ya que en los primeros siglos del cristianismo no se rendía culto ni a las imágenes ni a las personas, solo a la Santísima Trinidad, no existiendo de esa época imagen alguna. 

Cabe la posibilidad de que esta tradición antiquísima, se hubiera ido transmitiendo de boca en boca y de generación en generación a través primero de los habitantes del primitivo poblado de “La Vega” y de los de la Villa de Haro después, ya que no existe ningún documento fiable al respecto. Pero algunos historiadores apuntan a la posibilidad de que dicha leyenda se forjara a partir del hecho constatado de que la imagen, cuando esta revestida de sus mantos, lleva una granada en su mano. Siendo esto muy poco habitual en estas imágenes y siendo la granada un fruto de escasa tradición en nuestra zona; la gente debió preguntarse el ¿Por qué? de este símbolo en su mano, surgiendo, de la necesidad de una respuesta coherente, la leyenda que antes hemos narrado. 

Sin embargo es un hecho que la imagen de la Virgen de la Vega, tal y como se talló en el siglo XIV, lleva una manzana en la mano, símbolo éste que sí es más habitual en el tipo de imágenes de la época y que representa a la nueva Eva, que al contrario de lo ocurrido con la primera, que por una manzana trajo la perdición al mundo, la nueva Eva, por el fruto de su vientre traerá la salvación al genero humano. Así pues la famosa granada es un aditamento que se le colocó a la Virgen cuando se la vistió, por primera vez, superponiéndola a la manzana original. 

Teniendo en cuenta que esta moda comenzó a practicarse con asiduidad a partir del siglo XV y que los jarreros habían participado activamente en la conquista de Granada (1492), a las ordenes del Conde de Haro, y que habían obtenido mención y favores por parte de la casa real, algunos historiadores han querido ver este ornamento relacionado con eses privilegios obtenidos por la participación en la reconquista de granada, que hubieran reflejado añadiéndolo la granada al ajuar de la Vega. 

Las primeras noticias históricas que tenemos corresponden a un legajo fechado en 1063 en donde aparece nombrada la iglesia de "Santa María de Abeka" (actual Basílica de Nuestra Señora de la Vega) en una escritura de Sancho el de Peñalén: "illam ecclesiam quae dicitur Sancra Maria de Abeka"

Como esta iglesia tenía ya propiedades y era parroquia, es de suponer que la llegada de la imagen de la Virgen de la Vega a la villa, fuese bastante anterior, pocos años después de la conquista de 923.

La actual talla puede ser de finales del siglo XIII, combinando elementos de estilo románico y gotico.

En 1388 Alvar López de Puelles, vecino de Haro, fundó una capellanía para la Vega.
Hacia finales del siglo XIV o principios de XV la talla debió sufrir una reparación policroma, posiblemente para marcar la original.

En 1424 pasó por Haro Blanca I de Navarra, la esposa del rey Juan el Grande, con su hijo Carlos. Estuvieron en la villa del 8 al 12 de septiembre, lo que hace pensar que en aquella época se celebrase ya en Haro la festividad de la Virgen de la Vega.

Hacia 1492 se supone que se vistió la imagen por vez primera. Un privilegio otorgado por los reyes catolicos a los Condes de Haro, por su participación en la reciente guerra de Granada, habría permitido la colocación de una granada sobre la mano de la talla vestida con manto. Esto supuso una segunda intervención, muy desacertada, realizada para encajar la corona metálica y adecuar la imagen a la ropa de vestir. En ella perdió la imagen: el cabello, la toca y acaso también una primitiva corona. Hasta las puntas de los zapatos fueron recortadas al sobresalir mucho y empujar el manto en demasía.

Por último una tercera modificación de la talla se produjo en 1967, al quitar los ropajes que cubrían la talla desde 1492. Se hizo entonces necesaria la reparación de los destrozos ocasionados para cubrirla con ropajes, cepillando o arrancando elementos constituyentes de la primitiva talla, además de las roturas y desperfectos ocasionadas por el tiempo. A efectos de reconstrucción se tuvo en cuenta un tocado como el de la Anunciación en piedra de Silos o como el de la Virgen Blanca de León a fin de poder presentar la imagen sin vestiduras textiles y sin corona. 

Fue el 30 de diciembre de 1967 tras casi quinientos años escondida bajo su manto, después de una celebración multitudinaria presidida por autoridades locales y regionales, se descubrió la antigua talla gótica. El motivo fue las disposiciones dadas en el concilio Vaticano II para que los templos y las imágenes recuperaran su antigua sobriedad y sencillez, quitando de los templos e imágenes los muchos aditivos extraordinarios de que habían sido provistos. Así pues, esa tarde del 30 de diciembre de 1967, fue presentada la reforma realizada tanto en la imagen como en el propio templo. Tras la misa oficiada por el entonces Obispo de la Diocesis D. Abilio del Campo y de la Barcena, el Párroco de Haro y Capellán de la Basilica D. José Luis Olarte Espeso y el joven misacantano D. Jesús Orue, se permitió al curioso publico asistente contemplar la magnifica escultura de la virgen tal como fue realizada y venerada por nuestros antepasados en los siglos XIII, XIV y XV. 

La polémica surgió de inmediato, entre quienes querían que siguiera la Virgen que habían conocido durante toda su vida y los que veían con buenos ojos la, para todos, nueva imagen de la Patrona de Haro. Todo se solucionó de modo salomónico, permitiendo que durante unas fechas señaladas al año se vistiera a la virgen con sus mantos de siempre.

20 de septiembre de 2019

Nuestra Señora de Dimanche

Del blog Myriamir:
En 1873, el 8 de junio, domingo de la Santísima Trinidad, en Saint Bauzille de la Sylve, un pequeño pueblo del sur de Francia (cerca de Montpellier). Auguste Arnaud, un hombre que creía más en el diablo que en Dios, trabajaba obstinadamente los domingos a pesar de los repetidos reproches del sacerdote y de los feligreses.
Cuando se le dijo que estaba cometiendo un pecado, simplemente se rió de que los negocios del Señor eran demasiado numerosos para que le importara el trabajo de un aldeano como él. Era indignante que un cristiano se atreviera a profanar de esta manera los domingos.
Auguste Arnaud tiene 30 años, está casado desde hace seis años y tiene dos hijos.
Así que ese domingo estaba trabajando en su viña en el horario de misa. Alrededor de las 7 de la mañana Auguste se toma un descanso para comer un poco y fumar en pipa. Todo está tranquilo por allí.
A las 7:30. Auguste está a punto de encender su pipa cuando, de repente, a uno o dos metros de él, aparece, envuelta en una gran luz, una mujer de mediana estatura, vestida de blanco, y su cabeza coronada por una especie de corona alta "como la mitra de un obispo... Un gran velo blanco la envuelve hasta los pies.... Sus manos están cruzadas en el pecho".
 Augusto saltó y comenzó un diálogo en dialecto occitano:
- ¿Quién es usted? ¿Quién es usted?
- Yo soy la Santísima Virgen... No tengas miedo. Has abandonado Saint Bauzille (el santo de la parroquia, bien olvidado entonces). El jueves habrá que ir en procesión a San Antonio y escuchar la misa. A partir de hoy, tendrá que ir en procesión a Notre-Dame: todo el cantón de Gignac, Montpellier y Lodève.
Entonces María añade:
- Se debe colocar una nueva cruz y cambiar la otra. Colocarás una cruz con una Virgen al pie de la viña, y harás la procesión allí cada año. Ve y dile eso a tu padre y al cura ahora mismo.
El mensaje está terminado; la Santísima Virgen da otra cita:
- En un mes vendré a agradecerte.
Y la brillante apariencia se elevó al cielo....
Auguste dejó inmediatamente su trabajo y, cuando volvió a casa, le contó a su padre lo que había pasado. Los dos hombres fueron inmediatamente al presbiterio donde fueron recibidos por el sacerdote, el Padre Coste, que llegó a St. Bauzille hacía apenas dos meses y todavía no conocía a la familia Arnaud. El sacerdote escuchó a Augusto, pero dudó.
La entrevista duró 15 minutos. Finalmente, el Padre Coste, lleno de incertidumbre, envió a los dos hombres lejos, urgiéndolos a guardar silencio sobre el asunto. Cuando se fue, Auguste Arnaud se lo dijo a su sacerdote:
"No te obligo a creer todo lo que acabo de decirte. La Santísima Virgen que realmente se me apareció (y sé que la vi bien porque la vi como te vi a ti... y que la oí hablándome como te oí a ti, a ti, hablándome), bueno, la Santísima Virgen me ordenó que viniera a decírtelo... y me alegro de habértelo dicho. Y si hago todo lo que me ordenó hacer, sé que volverá a agradecerme como me prometió".
Desde el día después de la aparición, Augusto se puso a hacer lo que la Santísima Virgen le había pedido que hiciera:
Hizo hacer una cruz de madera y la instaló en el lugar indicado por María. ¡Pero el sacerdote se negó a bendecir esta cruz !.
El jueves 12 de junio, Auguste Arnaud y algunos miembros de su familia peregrinaron a la ermita de San Antonio, cuya capilla había sido restaurada en 1867.
El domingo 22 de junio, acompañado de nuevo por algunos padres, fue a Notre Dame de Grâce en Gignac.
El viernes 4 de julio, Auguste tenía una hermosa cruz de hierro dorado y plateado, que había encargado a Montpellier, sellada en un pedestal de piedra libre para reemplazar la cruz de madera temporal.
Auguste, habiendo cumplido todo lo que la Santísima Virgen le había pedido, sólo tuvo que esperar la cita prevista para el martes 8 de julio.
Y María Santísima cumplió con lo prometido. Según los testimonios de los testigos, parece que Auguste se levantó unos treinta centímetros sobre el suelo durante su contemplación y oración, que duró unos diez minutos. Estos mismos testigos no vieron a la Virgen María, pero algunos hablaron de una nube de vapor, una columna de humo blanquecino, pero nada muy específico.
Algunos habrían visto la cruz superada por un balón brillante y brillante. Lo que es más interesante es la enseñanza que la Virgen María había venido a llevar a la gente. En este sentido, el 8 de julio completa la enseñanza del 8 de junio.
El 8 de julio de 1873, en una segunda aparición, la Virgen María dijo a Auguste, en el dialecto del país: "No deberías trabajar los domingos." y luego siguió adelante:
"Bienaventurado el que cree, e infeliz el que no cree. Deberás ir a Notre-Dame de Gignac en procesión. Serás feliz con toda tu familia. »
María entonces deslizó el rosario que Ella llevaba en su mano izquierda, luego bendijo a la multitud con su mano derecha, diciendo: "Que se canten los himnos
Auguste continuó su vida como viticultor convirtiéndose en un ferviente cristiano y murió a la edad de 93 años.
Después de una larga investigación, Mons. de Cabrières autorizó, en 1879, la construcción de un santuario en honor de la Santísima Virgen María.

18 de septiembre de 2019

Nuestra Señora de Osier o del Mimbre

Del sitio Pelerinages de France:
La Santísima Virgen María llama a sus hijos dispersos y perdidos a la conversión. El milagro del origen de la peregrinación a Notre-Dame de l'Osier, en Vinay (Isère), entre Tullins y Saint-Marcellin, está certificado, en los archivos del departamento de Isère, por una sentencia de la corte de Saint-Marcellin:
"En 1649, Pierre Port-Combet, de religión hugonote, y viviendo en el lugar llamado Les Plantées, se comprometió, despreciando a la Santísima Virgen, a trabajar y tallar su propio armarier (mimbre) el día de la Anunciación, a pesar de la molestia que le ocasionaba a Jeanne Pélion, su virtuosa esposa, de religión católica. Pero Dios permitió que este mimbre derramara lágrimas de sangre en todos los tamaños que hizo, y en forma tan abundante, que Port-Combet estaba, él y sus ropas, manchados de sangre, así como las herramientas que usó. La mujer, viéndolo llegar en un estado sangriento, e ignorando la causa exclamó: "¡Ah! miserable, yo sabía bien que la Santísima Virgen te castigaría". "No estoy herido", continuó Port-Combet, "es porque el armador me arrojó sangre de todas las tallas que hice. ». Cuando esta buena mujer fue con él a ver ese mimbre milagroso, subiendo por la escalera, cortó dos armeros con las mismas herramientas, que no le arrojaron sangre: el hugonote volvió a cortar, y parecía que este árbol insensible estaba más irritado que antes, arrojándole sangre con más abundancia de la que había hecho antes. »
Este evento se dio a conocer rápidamente en todo el país. La autoridad eclesiástica ordenó una investigación y la autoridad civil, de acuerdo con las leyes entonces en vigor, condenó a Port-Combet a una multa de tres libras. Es esta sentencia de la corte de Saint-Marcellin, dictada por dos jueces, uno católico y otro protestante, la que establece los hechos por escrito.
Sin embargo, Pierre Port-Combet no se convirtió al catolicismo. También, siete años más tarde, mientras araba su campo, la misma Santísima Virgen se le apareció y conversó con él, advirtiéndole que se acercaba el fin de su vida y que, si no se convertía, "sería un agitador del infierno"; que si, por otra parte, cambiaba de religión, Ella lo protegería ante Dios. También le dijo que le dijera a los habitantes vecinos que sus oraciones no eran lo suficientemente fervientes.
Esta vez, el campesino abjurado recibió la Sagrada Eucaristía y murió santamente. Su cuerpo fue colocado al pie del mimbre milagroso. Alrededor del mimbre se construyó un pequeño oratorio y luego una capilla. El modesto santuario se convirtió en un lugar de peregrinación; se concedieron milagros y grandes gracias a los fieles que acudieron a él. El mimbre escapó de la destrucción esperada durante la revolución.
En 1834 la O.M.I. (Oblatos de María Inmaculada) reorganizó el santuario, con la fundación de un noviciado (1841) del que partieron muchos misioneros hacia Canadá, Ceilán y Sudáfrica en particular y donde los hermanos dejaron el testimonio de una vida devota y ejemplar; este noviciado se cerró en 1902, en aplicación de la ley de 1901 tomada contra las congregaciones religiosas y fue trasladado a Italia.
En 1842 se creó una estructura de acogida de peregrinos, confiada a una rama femenina de la Congregación de los Oblatos, transmitida por las Hermanas de la Sagrada Familia. Los Oblatos dejaron el santuario en 1997. El santuario fue confiado a laicos organizados en asociación: "la recepción en Notre Dame de l'Osier", con la permanencia de un capellán.
La construcción de la iglesia de Notre-Dame de l'Osier se inició en 1868 y fue consagrada el 8 de septiembre de 1873 por el obispo de Grenoble. En 1924, la iglesia de Notre-Dame de l'Osier fue erigida como basílica por decreto del Papa Pío XI. En el interior hay una reliquia del mimbre ensangrentado y trozos del arado de Pedro.
Una cruz y una capilla de Nuestra Señora del Bon-Rencontre fueron erigidas en el lugar donde Pedro se encontró con la Santísima Virgen María. Además, donde la Santísima Virgen desapareció a la vista de Port-Combet, se ha construido un pequeño oratorio en Notre-Dame de l'Epinouse.
Nuestra Señora de Mimbre es reconocida como el santuario de la conversión de los corazones por el benefactor y la presencia salvífica de la Virgen María.

17 de septiembre de 2019

Nuestra Señora de Dorleta

Del sitio Ibili mari pili:
Un manantial subterráneo fue el origen de Leintz Gatzaga. Sus aguas salinas le dieron la vida y durante siglos esculpieron en piedra una historia que hoy se descubre ante nosotros. Este pequeño pueblo amurallado, mantiene con orgullo sus calles medievales, conserva sus palacios y recuerda su pasado con un bello museo al aire libre. Enclavado en las laderas del alto Deba, conserva un rico patrimonio cultural y natural que debemos visitar.
Entre ellas el Santuario de Nuestra Señora de Dorleta. Emplazada sobre las ruinas del castillo construido anteriormente para defender la explotación salina, este pequeño templo se reserva sus encantos. Repartidos al azar en sus muros exteriores, se pueden encontrar piezas decoradas con adornos y tallas provenientes de alguna construcción anterior. En su interior, la Virgen de Dorleta, patrona de los ciclistas recibe visitas y ofrendas como maillots, guantes o incluso bicicletas.
Hay quien dijo que aquí se guardaba una de las espinas de la corona de Cristo, pero lo que sí es cierto es que entre estas paredes, se pudo contemplar hasta hace no mucho tiempo, una verdadera obra de arte. Según se cuenta, el Santuario mostró durante años un bello lienzo con la imagen de San Francisco De Asís. Era un hermoso cuadro donado por un vecino de Leintz Gatzaga que resultó ser una obra original del Greco. Hoy día se guarda en un almacén del Museo Diocesano de Donostia esperando un lugar para ser expuesto mientras una réplica del mismo se exhibe en las paredes de Dorleta.
El 8 de agosto de 1960, el Papa Juan XXIII, recibía en audiencia especial y extraordinaria a tres jóvenes que pedalearon desde Gasteiz a Roma a lomos de sus bicicletas, con una curiosa petición; la canonización de Nuestra Señora de Dorleta como patrona de los ciclistas. José Luis Sáez y Luis y Ángel Serrano portaban consigo la ilusión y el trabajo de un grupo de cicloturistas vascos que años antes ya había conseguido el apoyo del párroco de Leintz Gatzaga, del obispado de Donostia y de las federaciones guipuzcoana, vizcaína y española.
Gran aficionado al ciclismo, el conocido como “Papa Bueno” no se lo pensó dos veces, aprobó la iniciativa y otorgó su bendición. Apenas 20 días más tarde, el 28 de agosto, la Virgen de Dorleta era proclamada “Patrona universal de los ciclistas”. Hoy la devoción sigue en pie y en el interior del Santuario de Dorleta, como en la imagen instalada a apenas un kilómetro del puerto de Arlaban, se apiñan ramos de flores, maillots y otras ofrendas en señal de agradecimiento y devoción. Además del templo de Leintz Gatzaga, existen otros dos santuarios dedicados al ciclismo. El más cercano es la capilla de Notre Dame des Cyclistes ubicado Labastide d'Armagnac, en el departamento francés de las Landas, sin embargo el más conocido y de mayor tradición está en Italia, en la cumbre del puerto Gishallo, cerca del lago de Como, es la Madonna de Gishallo.

16 de septiembre de 2019

Nuestra Señora de los Ciclistas

Del sitio María de Nazareth:
Jean Robic, Louison Bobet, Eddy Merckx, Bernard Hinault, Laurent Jalabert, Tom Boonen, Alberto Contadora... todos estos nombres que resuenan en los corazones de los amantes de la pequeña reina, un día donaron sus camisetas a la capilla de Géou, conocida también como Nuestra Señora de los Ciclistas, en el poblado de Armagnac (Landes, Francia).
Este santuario alberga una asombrosa colección de camisetas de los mejores corredores desde la posguerra hasta la actualidad. “Más de 700 camisetas están en exhibición todo el tiempo, entre ellas, algunas muy antiguas hechas de lana. Estas camisetas son como exvotos. El espacio es limitado, 120 camisetas aún se conservan en contenedores de plástico y están a la espera de ser exhibidas.
Si la capilla de Géou ha unido su destino al ciclismo, se lo debe a un hombre apasionado por el deporte, el padre Joseph Massie. En la década de 1950, durante un viaje en bicicleta cerca del lago de Como, descubrió, en Italia, a la Madonna del Ghisallo, una capilla dedicada al ciclismo y erigida como santuario nacional por el papa Pío XII en 1948. Seducido, el padre Massie decidió hacer lo mismo en la capilla de Géou, donde solía celebrar Misa.
El 11 de mayo de 1959, un decreto de la Sagrada Congregación de Ritos convirtió oficialmente la capilla de Géou en el Santuario Nacional de los ciclistas. Siete días después, un domingo de Pentecostés, el obispo Mons. Matthieu presidió la inauguración de Nuestra Señora de los ciclistas.

15 de septiembre de 2019

Nuestra Señora de Ghisallo

Del sitio de la Fundación Cari Filli:
Desde 1975 los ciclistas españoles tienen su patrona en Nuestra Señora de Dorleta, cuyo santuario se encuentra ubicado en Salinas de Léniz (Leintz-Gatzaga), en Guipúzcoa. Allí pueden verse maillots firmados por ases como Federico Martín Bahamontes, Marino Lejarreta o Miguel Indurain.
Los ciclistas franceses tienen la suya en el santuario de Nuestra Señora de los Ciclistas, en la capilla de Géou, restaurada al efecto en 1959 y considerada desde 1996 monumento histórico. Allí, en Labastide-d’Armagnac (Landas, Aquitania) se ubica un museo del ciclismo.
La que es, sin embargo, patrona universal de todos los ciclistas es Nuestra Señora de Ghisello, la Madonna del Ghisallo, así declarada por Pío XII en 1948. Aquel año el Papa Eugenio Pacelli encendió y bendijo una antorcha que llevaron hasta el templo dos leyendas de la bicicleta de todos los tiempos como Gino Bartali (1914-2000, ganador de dos Tour y tres Giros, considerado el ciclista más devoto de la historiaprotector activo de los judíos italianos durante la Segunda Guerra Mundial) y Fausto Coppi (1919-1960, ganador de dos Tour y cinco Giros).
El santuario de la Madonna del Ghisallo se encuentra en el pequeño pueblo de Magrelio (Como, Lombardía), y la devoción a la Virgen bajo esa advocación se remonta al siglo XII. En 1135, unos ladrones atacaron al conde Ghisallo, quien, temiendo por su vida, invocó a la Virgen y consiguió dispersar a quienes intentaban matarle. Como muestra de gratitud edificó una capilla, que durante novecientos años permaneció como un punto más de devoción mariana de la comarca.
Pero el 12 de noviembre de 1905, el diario Gazzetta dello Sport organizó lo que sería el primer Giro de Lombardía, hoy convertido en una de las grandes clásicas de la temporada, y que aquel año hizo un recorrido Milán-Milán, que tuvo uno de sus momentos más duros en el paso de Ghisallo, con un desnivel medio del 5,2% y varios tramos en torno al 10%.
Encontrarse allí una capilla consagrada a la Virgen María fue un alivio en el sufrimiento para los participantes, italianos y católicos en su mayoría, y desde entonces se convirtió en lugar de peregrinación para los ciclistas.
En los años cuarenta fue destinado al santuario como párroco Ermelindo Viganò (1906-1985), un sacerdote aficionado al ciclismo que se propuso como objetivo que la Madonna del Ghisallo fuese considerada patrona universal de los deportistas del pedal. Empezó a esmerarse en la atención a los que acudían allí a pedir a la Virgen que les amparase en las distintas competiciones en las que participaban, y a recolectar pequeños objetos recuerdo de ciclistas famosos para crear el embrión del actual museo del ciclismo.
En 1948, finalmente, obtuvo el reconocimiento esperado, y el Papa designó a la Madonna del Ghisallo como patrona universal de los ciclistas. “Como los antiguos corredores”, instó Pío XII a Bartali y Coppi el 13 de octubre de ese año “os pasaréis de mano en mano la lámpara encendida, y durante todo el recorrido encenderéis con su mística llama otras llamas de fe y de amor, que llevarán a muchos lugares distintos la misma luz y el mismo calor, mientras vosotros, continuando vuestra carrera, no os detendréis hasta llegar a los pies de la Madre de Dios y Madre vuestra, quien os conducirá hasta el Corazón de Jesús: Per Mariam ad Iesum! [¡Por María a Jesús!]”.En 2006 se reformó y amplió el museo, donde regalaron bicicletas suyas mitos como Eddy Merckx, Francesco Moser o Marco Pantani, e incluso puede verse la máquina accidentada de Fabio Casartelli, trágicamente fallecido durante un accidente en el Tour de Francia de 1995. Todos, en algún momento, rezaron allí.

10 de septiembre de 2019

Nuestra Señora de Muxima

Se sabe que Paulo Novais Dias llegó al río Kwanza en mayo de 1560 con algunos padres y hermanos jesuitas, al frente de una misión a pedido de los reyes de N'Gola

Después fundó la capitanía de Kwanza, en 19 de septiembre 1571.

Regresó a Portugal y pocos años después volvió a la isla de Luanda en 1575, fundando el año siguiente la ciudad de São Paulo da Assunção de Luanda, siguiendo a Massangano, donde se instaló en 1582 y murió allí en 1589.

Se le atribuye la creación de las ermitas dedicadas a la Virgen María en el curso del río Kwanza: Nuestra Señora de Muxima, la Señora de la Victoria (Massangano) y Virgen del Rosario (Cambambe). 

En un relato enviado a la Santa Sede de Roma (en Lisboa con fecha del siglo XVII) para registrar la información acerca de la práctica misionera y la presencia de sacerdotes en el Reino del Congo y en el Reino de N'Gola, los lugares fuera de Luanda: Massangano Cambambe, Benguela y próximos a Luanda: San José de Calumbo y Nuestra Señora de Muxima. Por lo tanto, la parroquia de Nuestra Señora de Muxima aparece ya en el siglo XVII.

Desde entonces, la devoción a Muxima nunca dejó de ser practicada incluso en tiempos de guerra y la confusión generalizada. Por lo tanto, el pueblo angoleño nunca dejó el culto mariano, principalmente en Muxima, a pesar de las inmensas dificultades de cruzar el Kwanza  y su muy complicado acceso al santuario. A menudo, a pesar del mal estado de los caminos, era sin embargo, una hermosa aventura, porque podían observarse todo tipo de animales grandes y pequeños: antílopes, monos, elefantes, antílopes, ciervos, leones ... ¿A pie no se podía acceder a Muxima.

La fiesta de "Mama Muxima" se realiza en la primera semana de septiembre, pero en 1974 el Gobierno General informó la cancelación por la inseguridad. Lo sucedido en el año 1975, es fácil de imaginar. 

Después de la independencia de Angola se reanudan las peregrinaciones a Muxima, aunque con reducción del número de fieles.

Alrededor de 2000 comienza una nueva realidad en el santuario de Muxima, cuya historia es más fácil de rastrear en los contornos.   

Con la creación de la diócesis de Viana en 2007 y la aprobación de Muxima para ser patrona de Angola, otra faceta de la historia del santuario comienza en la que, para cualquier historiador, será aún más fácil de abordar.

8 de septiembre de 2019

Natividad de la Virgen

Muy Feliz cumpleaños.
Hace 2034 años naciste Inmaculada.
Cantémosle el Feliz Cumpleaños ylas Mañanitas.

7 de septiembre de 2019

Nuestra Señora de las Angustias

Del sitio de Las Siervas de los Corazones Traspasados de Jesús y María:

La iglesia de San Bartolomé, ubicada en pleno centro histórico de la ciudad de Murcia, alberga una de las imágenes marianas más veneradas por sus habitantes: la de Ntra. Sra. de las Angustias. Se trata de una talla en madera policromada y estofada plenamente barroca, representando a María sosteniendo el cuerpo inerte de Jesucristo al pié de la Cruz, completando el grupo escultórico cuatro angelitos que acompañan a la Virgen en esta representación tan cargada de dolor y dramatismo. 

La obra fue realizada en 1740 por el insigne Salzillo, quien recibió el encargo por parte de la Cofradía de Servitas. Su belleza y perfección anatómica es indiscutible, constituyendo uno de los mejores ejemplos que de este icono pasional existen a lo largo y ancho del mundo.

La Orden de Servitas (o Siervos de María) aparece en Murcia en 1665, siendo la veneración y fomento del culto a Nuestra Señora de las Angustias uno de los principales fines de sus cófrades. Desde el momento en que se adquiere la talla, la Virgen de los Servitas empezaría a tomar parte en los desfiles de Semana Santa de la ciudad, surgiendo con ellos el creciente fervor de los murcianos hacia esta advocación mariana. En 1797 sería entronizada en una hermosa capilla de estilo barroco que a tal efecto fue edificada en el templo de San Bartolomé, la misma que actualmente ocupa y donde recibe culto durante todo el año. Incluso sería nombrada protectora del gremio de plateros, comerciantes que tradicionalmente han desarrollado su actividad en las calles aledañas a esta iglesia.

Clemente XII concedió indulgencia plenaria a cuantos visitaran la capilla de Ntra. Sra. de las Angustias durante el Domingo de Ramos. Y en 1830, Pio VIII concede otra indulgencia plenaria para todos los que lo hicieran desde la víspera del Viernes de Dolores hasta ponerse el sol en dicho día, que es cuando se celebra su festividad.

Nuestra Señora de las Angustias desfila la noche de Viernes Santo en la llamada "Procesión de los Servitas", recorriendo a hombros unas calles repletas de fieles que esperan el solemne paso de la Virgen. El color negro de las túnicas de sus cófrades y penitentes tiñe de luto la primavera murciana desde hace más de doscientos años, constituyendo uno de los desfiles más emotivos de cuantos se celebran en la capital.

3 de septiembre de 2019

Nuestra Señora de Marianka

Del sitio Aleteia:
Marianka reúne al pueblo eslovaco desde hace más de 600 años y forma parte de la ruta del Camino de Santiago que arranca en Budapest.
Marianka es el lugar de peregrinación más antiguo de Eslovaquia. Está situado en el extremo Este de Eslovaquia, a solo 16 kilómetros en automóvil al norte de la capital, Bratislava y linda con la frontera de Austria. Si se viaja desde Viena, se tarda poco más de una hora (está a 81 kilómetros).
Según algunas referencias, la imagen de la Virgen que todavía hoy se venera es del año 1030. Es una pequeña estatua que representa a Santa María Virgen con el Niño Jesús en brazos. Nuestra Señora muestra al Hijo de Dios en alto. Se trata de una preciosa talla de madera de peral, a la que posteriormente se añadieron las dos coronas y un manto como vestimenta de adorno para enriquecer el culto.
Según fuentes históricas, el rey de Hungría Luis I el Grande, se detuvo en el lugar -en medio del bosque- en 1377 y mandó construir una iglesia dedicada a la Natividad de la Virgen. A los tres años se acabó la construcción y el mismo rey hizo enviar una estatua para el altar.
Posteriormente, ya en el siglo XVII, el emperador Leopoldo I hizo reconstruir el templo en estilo barroco, añadiendo altares laterales, ornamentación escultórica y pinturas que daban mayor realce al conjunto.
En origen, sin embargo, los historiadores han visto que en Marianka hubo una iglesia gótica.
Hoy la pequeña ermita se encuentra en obras en el interior, aunque sigue abierta al culto y a las visitas. La iglesia, por otra parte, fue restaurada hace pocos años.
Mientras, sigue creciendo un culto floreciente a la Virgen que no paró ni siquiera en la época comunista de la historia de Checoslovaquia. De hecho, los sacerdotes y laicos de todas las edades (sobre todo jóvenes) de la Iglesia clandestina hacía frecuentes peregrinaciones a este santuario.
La tradición cuenta que un bandido vivía escondido entre los frondosos árboles de la zona. Tuvo hijos pero entristeció al ver que tenían una discapacidad. Dios se apiadó de él y mandó que cavara en la tierra. Así fue como encontró una imagen de la Virgen y un manantial de agua. El bandido acercó a los pequeños a beber de aquella fuente y milagrosamente quedaron curados.
Ante aquel prodigio, decidió convertirse y cambiar de vida, y se dedicó hasta su muerte al cuidado del lugar donde se veneraría la imagen de Nuestra Señora que había hallado.
De la fuente sigue hoy brotando agua y son muchas las personas que acuden para llenar recipientes que llevan a sus casas o a enfermos.
Marianka es tan importante como foco de peregrinación mariana que también forma parte del Camino de Santiago por lo menos desde el siglo XV. Esta ruta arrancaba desde Pest y Buda, en el Reino de Hungría, y pasaba por ciudades como Viena, Venecia, Ferrara, Mantua, Turín, Aviñón y Arlés, para unirse en Montpellier a la ruta que descendía desde Alemania.
Desde el siglo XVI había Studium Generale en Marianka (donde podía cursarse Teología) y su rector estaba autorizado por Roma a conceder el doctorado si un estudiante lo merecía.
En 1786, la orden religiosa que estaba al cuidado del santuario fue disuelta por orden de José II y el príncipe Schwarzenberg de Orlík nad Vltavou (una población de la actual Chequia) lo convirtió en un pabellón de caza. Después pasaría a ser una casa señorial de varias familias.
En 1927, una congregación se hizo cargo del culto. Pero la represión comunista hizo que en 1950 fueran prohibidas las organizaciones religiosas en toda Checoslovaquia. La de Marianka quedó abolida y no pudo regresar hasta 1990, fecha en que -después de la caída del Muro de Berlín en 1989 y la disolución de la Unión Soviética entre 1990 y 1991- se volvió a comenzar: hubo reconstrucción de la iglesia y del monasterio.
La cueva de Lourdes y el Via Crucis exterior (con imágenes de tamaño natural) son de principios del siglo XX. Este último también había sido destrozado por la fuerza bajo el régimen comunista y en los años 90 se pudo reparar.
Al llegar hoy a Marianka, el visitante encuentra el santuario rodeado de un hermoso bosque de árboles centenarios y un riachuelo, un paraje que ayuda a la oración y que muchas personas escogen para hacer un retiro espiritual.
La devoción a la Virgen ha superado los escollos de la Historia y la pequeña imagen de Nuestra Señora sigue tocando los corazones de muchos. En 2011, el santuario fue declarado Basílica Menor por el Papa Benedicto XVI.