Todo comenzó en marzo de 2016, pero creemos firmemente que el verdadero comienzo coincide con nuestra consagración al matrimonio.
Signos y manifestaciones extraordinarias han marcado nuestros corazones. Una estatuilla comprada en Medjugorje que representa a la Reina de la Paz ha derramado agua y sangre. Un cuadro de la Divina Misericordia comprado en la Plaza de San Pedro lloraba sangre y agua de la Misericordia de Jesús.
Con la primera aparición de la Virgen nuestra vida cambió.
Ella nos mostró el camino y una misión que cumplir: llevar a cabo sus planes de conversiones y de retorno al Padre Nuestro.
Ahora la Santísima Virgen se aparece durante el rezo del Santo Rosario y más allá. Deja mensajes de conversión y de preparación para los acontecimientos que afectarán a la humanidad. Los hemos recogido y transcrito desde el principio. Nuestra Madre Inmaculada nos ha pedido que los difundamos para que todos puedan meditar y ser redimidos antes del fin de los tiempos. Tenemos una misión dictada por los planes de la Santísima Virgen y nadie puede obstaculizar este camino.
Medita y reza mucho con tu corazón dondequiera que estés, por la salvación de todas las almas del mundo.
Gianni y Gisella
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