A principios del siglo XIII, en el pueblo de Trapani, en el extremo noroeste de Sicilia, vivía un joven mudo. Había perdido el habla al nacer. Una noche, la Madonna Della Cava le visitó en sueños. Ella le dijo: "Entra y descúbreme desde el suelo". La Virgen le dijo dónde estaba enterrada, en la cercana localidad de Ronzi, en la provincia central de Enna. A la mañana siguiente, el niño se despertó e intentó contarle el sueño a su madre. Pero la madre desestimó su historia, creyendo que se trataba sólo de su imaginación.
La Virgen visitó al niño en un segundo sueño y le ordenó de nuevo que entrara y la descubriera. Una segunda vez, el niño le contó el sueño a su madre y ésta volvió a ignorar a su hijo. Finalmente, por tercera vez, la Madonna Della Cava visitó al muchacho en sueños. Le suplicó que la sacara de la tierra. Esta vez, el niño suplicó tan enérgicamente a su madre que ésta se convenció de que sus sueños tenían algún mérito.
De ahí que la madre, el hijo y otros aldeanos que estaban igualmente impresionados con la historia del sueño del niño viajaran al pueblo de Ronzi. Allí comenzaron a excavar en una zona. Como no encontraron a la Virgen, erigieron un santuario en su honor. Volvieron a excavar en un segundo lugar, pero sin éxito. En esta segunda excavación se erigió otro santuario. Al tercer esfuerzo, la gente encontró su recompensa. En el suelo había una enorme piedra brillante con la imagen de la Madonna Della Cava pintada. Los aldeanos se arrodillaron y se humillaron ante esta imagen de la Madonna Della Cava. De repente, el niño recuperó milagrosamente el habla. Este es el milagro de la Virgen Della Cava.
Los habitantes de Trapani intentaron llevar la piedra a su pueblo. Al intentarlo, la piedra cayó al suelo y se partió. Interpretaron esto como una señal de que la Madonna pertenecía al lugar donde fue descubierta. Así que construyeron un hermoso santuario en el lugar donde se encontró la Virgen. Se convirtió en la iglesia de la Madonna Della Cava, que sigue en pie hoy en día. La piedra con la imagen de la Virgen se encuentra en el interior de la iglesia, cerca del altar mayor.
El Papa Inocencio XIII declaró inmediatamente, a través de la Doctrina Papal, que la iglesia era una verdadera parroquia. Y el distrito urbano de Ronzi fue rebautizado como "Pietraperzia" - "Pietra" significa "piedra" o "roca" y "Perzia" significa "pueblo". Los Perzii (los nativos de este pueblo), todavía veneran a la Madonna Della Cava y buscan en ella la salvación. En Sicilia, la segunda semana de agosto se celebra una fiesta anual en su honor, que ha perdurado a lo largo de los siglos hasta nuestros días.
Redactora de NorthEndBoston.com
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