Hacia el año 1546 , los portugueses obtuvieron una gran victoria en las Indias Orientales sobre los musulmanes, gracias a la intercesión de Nuestra Señora.
Los portugueses iniciaron la construcción de la fortaleza de Diu como símbolo de su influencia comercial en la India, en noviembre de 1535 y terminaron en febrero del año siguiente. La fortaleza era de forma circular, hecha de piedra sólida y cal. Había una profunda zanja inmediatamente antes de estas paredes gruesas y la fortaleza tenía tres bastiones triangulares. Manuel De Souza fue nombrado primer capitán de la fortaleza, era refugio de soldados y estaba custodiado por embarcaciones.
No pasó mucho tiempo antes de que los portugueses quedaran bajo asedio, ya que una flota otomana compuesta por 72 barcos asediaron al baluarte en septiembre de 1538. Hubo muchas batallas campales, y a medida que pasaba el tiempo, los portugueses sufrían una escasez de hombres, de munición y de nutrición adecuada. Esto se tradujo en escorbuto y gran sufrimiento a los defensores. El fuerte tenía menos de 40 hombres que quedaron con vida. El asedio terminó después de que una fuerte fuerza de ayuda portuguesa llegó a la escena, pero en realidad la victoria fue el resultado de la galantería de los hombres y mujeres que defienden el fuerte y la sombría determinación con la que los portugueses sostuvieron los bastiones contra toda forma de asalto.En 1546 hubo un segundo asalto en Diu que comenzó la víspera de Pascua, y esta vez los portugueses frustraron los esfuerzos de los turcos para capturar el fuerte en una batalla campal registrada como una de las más grandes peleadas por las tropas portuguesas en la India. El asedio había continuado ininterrumpidamente desde el 20 de abril de 1546 hasta el 7 de noviembre, cuando una flota portuguesa finalmente llegó a la escena bajo el virrey Juan de Castro.
El éxito portugués en Diu confirmó el dominio portugués y su dominio sobre la región. Los relatos contemporáneos, por supuesto, no mencionan la intervención milagrosa de la Santísima Virgen María durante el sitio, aunque se registró que apareció en las murallas con una lanza en la mano para defender el fuerte del enemigo.
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