Del sitio Aleteia:
En Cataluña (comarca de Solsonés en la provincia de Lérida) existe un restaurante que trabaja ininterrumpidamente desde su inicio en el año 1542, “El Hostal de Pinós”.
Es de referencia en toda la comarca y de todos los visitantes que atrae con su comida tradicional y su rica historia, además de estar en un punto geográfico privilegiado. Situado a 900 metros por encima del nivel del mar en una colina con vistas a los cuatro vientos.
El restaurante es parte del conjunto monumental del santuario de Pinós, lugar emblemático y con tanta historia ligada a los templarios, los hospitalarios y la Virgen María.
Según una leyenda, fue fundado gracias a la aparición de la Virgen María.
Era el 1505 y desde hacía tiempo la peste azotaba toda la comarca, llevándose la vida de tantas personas.
Una mañana un campesino vecino de Matamargó llamado Bernat Casas iba rumbo a Biosca, en el camino se detiene a rezar en el Santuario de Pinós, edificado por los templarios en el año 1312 y gestionada por la orden religiosa de los hospitalarios.
Mientras estaba en oración, al joven campesino se le aparece la Virgen para preguntarle cómo iba la peste en toda la comarca.
Sorprendido, le responde que la enfermedad parece no tener fin y que la gente por esa causa estaba poco a poco perdiendo la fe.
Entonces Ella le pidió que hiciera construir una iglesia para alabar a Dios y su madre.
El hecho fue confirmado por el Tribunal eclesiástico, la aparición es cien por cien verídica y en el lugar se construye la actual iglesia de Santa Maria de Pinós y al lado el Hostal del Santuario de Pinós, inaugurado el año 1524.
El edificio original de la Iglesia ha sido objeto de diversas obras de ampliación y de remodelación entre las que están las fechadas por la portada en 1642.
Sobre el presbiterio está esculpida la imagen de la Madre de Dios, en la siguiente se ve el escudo de los Hospitalarios, en otra el escudo de los Pinós y una más con el de Ardevol.
En el camarín se encuentra la imagen de la Virgen de Pinós de madera policromada del siglo XVI. La Virgen María lleva el niño en el brazo izquierdo y en la mano derecha muestra una piña que es el distintivo de Pinós.
La imagen formaba parte de un retablo que se perdió en un incendio en el año 1936.
Encima del altar también se puede observar un fragmento del retablo barroco con la escena de la Aparición de la Virgen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario