Desagravio por Venezuela

Una vez he pedido a aquellos que leen este blog que recen un Rosario en desagravio por algún hecho ocurrido contra Nuestra Madre del Cielo. Fue así cuando en Buenos Aires apareció una imagen de la que llamaron la virgen abortera. (De la cual estoy indignado como porteño que soy).

Hoy quiero hacerlo de nuevo por lo ocurrido en Venezuela el 6 de noviembre pasado, más precisamente en la ciudad de Maracaibo, capital de El Zuila. En la sede de la administración del Metro de esa ciudad y por orden del gobernador puesto a dedo por el actual gobierno nacional, ha cambiado una imagen de Nuestra Señora de Chiquinquirá, mas conocida como "La Chinita" por una del dictador Hugo Chavez.

La noticia puede leerse en varios sitios  entre ellos Su Noticiero, Aleteia, Tenemos Noticias.

Los lugareños se encuentran indignados y buscan con desesperación donde ha ido a dar la imagen de La Chinita.

El Zuila siempre se destacó por oponerse a los gobiernos autoritarios de Maduro y Chávez. "La Chinita" para los habitantes de esta Provincia siempre fue sinónimo de resistencia y esperanza. Si unos imbéciles (pido disculpas por el exabrupto), piensan que quitando imágenes religiosas la gente se olvida de la religión y pierde la fe está muy equivocada.

La Iglesia siempre se hizo más fuerte y resurgió en las situaciones más adversas que padeció. La historia lo demuestra. Roma jamás pudo detener con las persecuciones a los cristianos el avance de las ideas de Cristo por todo su imperio. El régimen comunista no pudo doblegar la religión católica en Polonia y no solo fue consagrado Papa San Juan Pablo II en 1978 cuando no se veía venir la caída del Muro de Berlín y sus consecuencias, sino que era la Nación con mayor cantidad de católicos en el mundo. China hoy persigue a los católicos, derriba iglesias por orden del gobierno popular pero no por eso la gente teme sino que sigue diciéndole SI a Cristo y a su Madre.

En Latinoamérica Nicaragua persigue sacerdotes y los distintos movimientos que generan violencia pidiendo cambios en los gobiernos de Latinoamérica queman iglesias y destrozan imágenes, pero los católicos no nos rendimos.

Por eso, pido un Rosario de desagravio por lo acontecido en Venezuela y pido también que el 18 de noviembre, día que se celebra la fiesta de la Virgen de Chiquinquirá no solo recemos el Rosario, sino también hagamos un pequeño acto de caridad con cualquier hermano que tengamos cerca en honor a Nuestra Dulce Madre.

Gracias.

Les dejo un video donde pueden ver lo espectacular que es la fiesta de la Virgen de Chiquinquirá.