20 de junio de 2023

Nuestra Señora del Milagro de Casalbordino

Del sitio Santuario del Milagro de Casaboldino:

El documento histórico redactado por Don Giuseppe Muzio, hijo de Alessandro Muzio, conservado actualmente en los archivos parroquiales de Pollutri, relata la aparición de la Virgen el 11 de junio de 1576.

A continuación figura el texto íntegro del registro más antiguo existente en la parroquia de San Salvatore di Pollutri, el "Libro unico dei battezzati, morti, matrimoni e confermati del 1601":

"Andando Alex. Mutio di Pollutro de unos setenta años de edad, hombre estimado de bien, de buena vida y temeroso de Dios el día de lunes, segunda fiesta del Santo Pentecostés, once de junio y fiesta de San Bernabé del año 15? antes de la celebración de la Misa con la corona en la mano, rezando y rezando una tercera parte del Rosario, estando en aquel lugar muy devoto, para ver su campo de trigo, sembrado en la llanura del territorio de Casalbordino, y estando casi cerca de dicho campo, oyó tocar la campana de la dicha tierra de Casalbordino, que el Santísimo Sacramento del cuerpo de Nuestro Señor se elevaba en la santa Misa, se arrodilló devotamente para adorar aquel santísimo sacramento como cristiano diciendo Oh Señor y Redentor de la generación humana, que descendiste del Cielo para tomar carne humana en el seno de la gloriosísima Virgen María, tu Madre Santísima, y la hija más principesca preconizada por un acto de verdadera caridad, sólo para redimir al género humano, ten compasión de mí, pecador escogido."

"Inmediatamente en ese momento la Madre de Gracia y Misericordia se le apareció diciéndole: 'Oh devoto mío, no dudes, sabe que en esta tarde mi único Hijo, a causa de los muchos pecados cometidos diariamente por los cristianos, había determinado destruir el mundo entero con granizo y tormentas, ya que en este día a la luz de la tarde el tiempo cambió con un gran viento, lluvia y granizo, de modo que se sospechaba que todos los campos sembrados se habían perdido, adelántale, oh devoto mío, ve alegremente a tu campo que no hay daño verdadero, luego vuelve, y dile a tu Arcipreste que observe los días de fiesta que por tal causa, a veces mi Hijo envía granizo, tempestad, vientos nocivos sobre la faz de la tierra. Dicho esto desapareció." 

" Contó que cuando apareció aquel bosque estaba lleno de esplendor y luz, y en aquel lugar, donde se detuvo la Reina del Cielo, permaneció seco, estando el suelo embarrado y mojado por el agua del día anterior. El dicho Anciano se levantó todo alegre y contento y fue al dicho campo de trigo, donde no halló daño, y luego volvió a la tierra de Pollutro no volviendo a su casa, y fue a ver al dicho Arcipreste, que se llamaba D. Mariano Diddono. "

" Mariano Diddono de la tierra de Latessa a cuyas palabras dio crédito, e inmediatamente alertó al Muy Reverendo Vicario de Arbona en aquel tiempo en Lanciano llamado D. Gio: Tom Mancino, hombre de grandes letras, y médico sabio y prudente, y habiéndole escrito del caso ocurrido, vino inmediatamente, sin demora, a tomar información de la vida del dicho Alexandro, y examinó a la gente de Pollutro y también de Casalbordino, y certificó la buena vida, reconoció también el lugar seco, donde había estado la Santísima Virgen, y dio ordenes, de que se construyera la Iglesia en su honor, siendo el primero en tirar la piedra, creando los procuradores, Geronimo di Geronimo y Giovanni Fatalone de la dicha tierra de Casalbordino, quienes, en poco tiempo y en el mismo año, construyeron una pequeña iglesia con un pequeño altar y una imagen de la gloriosísima Virgen María, y a los pies de esta imagen se erigió el citado Alejandro, tal y como se encuentra hoy, aunque dicha iglesia fue ampliada posteriormente, levantó el altar mayor, pintado con hermosas figuras, además de los otros dos altares del Carmelo y de Constantinopla, y otros ornamentos, donde florece con devoción, y milagros en virtud de aquella gloriosísima Virgen, que siempre puede ser propiciación, y advocación de sus devotos."

"D. G. Mutio hijo del dicho Alexandro, sin pretenderlo he escrito de mi puño y letra dicho suceso".
          

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