Nuestra Señora de la Buena Hora

 Del sitio Maejesus:

 La devoción a Nuestra Señora de la Hora o de la Buena Hora se invoca para que interceda en los momentos de mayor aflicción: para la curación de las enfermedades del cuerpo y del alma, y especialmente en el momento del parto, protegiendo la vida de las mujeres embarazadas y de los bebés. El parto siempre ha sido un momento delicado para las mujeres y sus familias, especialmente en una época en que la medicina no ofrecía las condiciones actuales para proteger a la madre y al niño. 

Nuestra Señora de la Hora es la patrona de la parroquia del mismo nombre en el concejo de Matosinhos, cerca de la ciudad de Oporto, en Portugal. Tiene este nombre gracias a la fe que su población ha dedicado siempre a la Patrona. Por esta razón, se negaron pacíficamente a cambiar el nombre del lugar. Antes del siglo XVIII, esta parroquia no era más que una aldea, con una única "venta" abastecida de víveres, tejidos, ferretería, medicinas y otros despojos. Así vivía la gente sencilla del lugar conocido como Señora de la Hora.

La Capilla de Nuestra Señora de la Hora fue construida por deseo de Aleixo Francisco en 1514. Eligió un lugar en el Monte do Viso donde había un manantial natural con siete caños, conocido como Mãe das Águas. Pronto se extendió la devoción entre el pueblo, que la eligió como patrona. La gran fe dedicada a la Señora de la Buena Hora acabó recayendo incluso en el agua de los siete caños, que fue utilizada en un ritual único creado por ellos. 

Debido a su proximidad a la ciudad de Oporto, la aldea de Señora de la Hora se desarrolló y su población creció. Desde los lugares más distantes del país, innumerables peregrinos acudían a la capilla para depositar a los pies de la Virgen las ofrendas prometidas en tiempos difíciles. A principios de 1932, se creó la Parroquia de Señora de la Hora. Desde 1968, la capilla se ha convertido en un santuario de la patrona. Su fiesta anual se celebra el jueves de la Ascensión, fecha movible.

La región de Gafanha es hermosa, bañada por el río y el mar en toda su extensión. Las gentes, muy religiosas, empezaron a referirse al lugar como Gafanha da Boa Hora, en honor a su patrona. La imagen era la misma que la de la Virgen de la Hora, pero venerada por los antepasados con el título de Señora de la Buena Hora, porque la "buena hora" era necesaria para salir y llegar de la pesca; para las mujeres a punto de ser madres; y porque todos desean dejar este mundo con el abrazo de la Madre, y entrar así en la gloria eterna de Cristo Jesús. El culto a Nuestra Señora de la Hora o de la Buena Hora está tan arraigado en el corazón del pueblo portugués que se introdujo con estos títulos en todas las colonias del reino. 

En Brasil, se inició en Salvador, a través de un misionero de Gafanha da Boa Hora, que adquirió una imagen semejante a la patrona de su ciudad natal y comenzó a difundir el culto a Nuestra Señora de la Buena Hora.

La iglesia más antigua de esta devoción construida en suelo brasileño está en Olinda, Pernambuco. Sin embargo, este título mariano da nombre a muchos lugares del país donde la Virgen de la Hora es también la patrona.