Tiene su origen en el milagro (5 de agosto de 1485) del desgarro de una imagen pintada dos años antes en la pared de una casa rural.
La construcción se inició el 26 de mayo de 1487 por Antonio di Giorgio Marchisi da Settignano y luego por Francesco da Pietrasanta, que había elaborado previamente el proyecto (27 de noviembre de 1485). Se terminó en 1522.
La fachada, adornada con un magnífico portal de Giovanni di Giampietro da Venezia (1495), se vio privada de su cornisa original, parcialmente dañada por el terremoto de 1703.
El aireado y majestuoso interior es uno de los mejores logros del Renacimiento en Umbría.
Desde la derecha se pueden admirar: la Capilla de San Ubaldo de los Angelucci da Mevale, la Capilla de los Reyes Magos de Perugino (1521), el altar de la Virgen con parte del fresco de 1483, la Capilla de San Carlos Borromeo, la Capilla de la Deposición de Spagna (1520), la Capilla de San Alfonso, antes Santa Catalina y finalmente la Capilla de la Resurrección de Orazio Alfani.
El cuadro de la Piedad que adornaba esta última capilla, así como los lienzos de Santa Cecilia y Santa Catalina de la capilla del mismo nombre y la pila de agua bendita, fueron retirados en 1923 por temor a robos.
La misma suerte corrió el magnífico busto de Subrezia Lucarini Valenti, entre las dos capillas de la pared izquierda, tras la fantasiosa invención de un intento de robo en 2008.
Los lienzos, así como el magnífico fresco desprendido, que hasta 1995 podía admirarse en la pared del fondo, se exponen ahora en la Colección de Arte de San Francisco.
Adosado a la iglesia, en el convento que en su día perteneció a los Canonici Regolari Lateranensi y luego a los Liguorini, funciona desde 1935 el Istituto Medico Pedagogico (Instituto Médico Pedagógico), que lleva el nombre del beato Pietro Bonilli, que lo quiso tenazmente aquí, para la asistencia y el cuidado de niñas discapacitadas.
También cabe destacar los MONUMENTOS SEPULCRALES de la familia Valenti
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