21 de marzo de 2022

Nuestra Señora de la Clemencia de Avila

Del sitio Cari Filii:

La Virgen de la Clemencia es una antigua imagen muy venerada. El día 19 de enero, se celebra su fiesta con gran solemnidad y amor, por ser éste el aniversario de su aparición a Santa Teresa.

La historia de esta entrañable aparición la relata la primera cronista del Monasterio, doña María Pinel, y dice así:

«Llegó, en fin, el día en que la Santa había de venir a ser Priora, y fue el 6 de octubre de 1571. Protestaban las religiosas que las dejasen votar. El Padre Provincial decía: «¿Pues, en fin, no quieren a la Madre Teresa de Jesús?» Pero en medio de la resistencia, doña Catalina de Castro levantó la voz y dijo: «La queremos y la amamos: Te Deum laudamus». Palabras que hasta hoy se repiten en esta santa Comunidad con la fuerza del amor. Con esto la siguieron muchas; y todas le dieron la obediencia. Y como en todo la guiaba nuestro Señor y gobernaba sus acciones, se valió de un medio grande para allanar los interiores."

"Puso en la silla Prioral una imagen de nuestra Señora. La Santa le puso las llaves del convento en las manos y tocó a Capítulo. Los corazones de todas quedaron derretidos. Y porque Cristo nuestro Bien y su Santísima Madre se esmeraban en favorecer esta santa Comunidad, quiso la soberana Reina bajar a aceptar el oficio de Priora perpetua de su convento".

En la serie "Teresa de Jesús" de RTVE, dirigida en 1984 por Josefina Molina e interpretada por Concha Velasco, vemos la escena del Capítulo presidido por la Virgen de la Clemencia entre los minutos 4:47 y 13:20, con el "La queremos y la amamos" en el minuto 9:03. Los hechos sucedieron el 6 de octubre de 1571, meses antes de la aparición. 

En esa noche, del 19 de enero de 1572, la Virgen de la Clemencia –la imagen que Santa Teresa había puesto en la silla prioral del Coro alto–, habló a la Santa al finalizar el oficio litúrgico de Completas.

Así lo narra ella:

"La víspera de San Sebastián, comenzando la Salve, vi en la silla prioral, adonde está puesta nuestra Señora, bajar con gran multitud de ángeles la Madre de Dios y ponerse allí. A mi parecer, no vi la imagen entonces, sino esta Señora que digo. Parecíame [se ponían] encima de las sillas ángeles. Estuvo así toda la Salve, y díjome: 'Bien acertaste en ponerme aquí; yo estaré presente a las alabanzas que hicieren a mi Hijo, y se las presentaré'.

Después de esto quedéme yo en la oración que traigo de estar el alma con la Santísima Trinidad, y parecíame que la persona del Padre me llegaba a Sí y decía palabras muy agradables. Entre ellas me dijo, mostrándome lo que quería: 'Yo te di a mi Hijo y al Espíritu Santo y a esta Virgen. ¿Qué me puedes tú dar a mí?'"

El relato es conmovedor y no deja ninguna duda de la experiencia mariana que la Santa tuvo y la comunidad de aquel tiempo.

Las carmelitas del Monasterio de La Encarnación así lo han vivido durante los siglos que han transcurrido desde entonces. Han sentido la necesidad de transmitir esta devoción a la Virgen de la Clemencia, y han sido testigos de los milagros que Ella ha obrado como Madre e intercesora nuestra.

Su imagen se conserva en el mismo Coro en el que la puso Santa Teresa. En el siglo XVIII, con el fin de realzarla, fue elevada de la silla prioral a un retablo hecho expresamente para Ella en el mismo lugar. La Virgen de la Clemencia puede verse desde la iglesia principal: situados en el presbiterio, basta con alzar la vista hacia el coro superior y desde el exterior de la calle, a través de una ventana en la que se percibe las dos luces que la iluminan.

Como todos los años por la fecha del 19 de enero, la comunidad de carmelitas cantará en el Coro de la Virgen de la Clemencia (Coro alto de la iglesia del Monasterio) a las 18.00 horas las mismas Completas que cantó la Santa con la comunidad aquel día de 1572, seguidas de varias Salves.

María, Salud de los Enfermos, ruega por nosotros

No hay comentarios:

Publicar un comentario